viernes, 26 de abril de 2013

Brújulas que buscan sonrisas perdidas / Albert Espinosa

ESPINOSA, A. Brújulas que buscan sonrisas perdidas [e-book]. Barcelona: Grijalbo, 2013.

Nunca dejaré de buscar mi archipiélago de sinceridad... ¿Quieres formar parte de él? «Jamás nos mentiremos... Escúchame bien, eso implica algo más que ser sincero... En este mundo mucha gente es falsa... Las mentiras te rodean... Saber que existe un archipiélago de personas que siempre te dirán la verdad vale mucho... Quiero que formes parte de mi archipiélago de sinceridad...» «Saber que puedes confiar en la otra persona, que nunca te mentirá, que siempre te dirá la verdad cuando selo pidas, no tiene precio... Te hace sentir fuerte, muy poderoso...» «Y es que la verdad mueve mundos... La verdad te hace sentir feliz... La verdad creo que es lo único que importa...»

... Tardé también tres o cuatro timbrazos en cogerlo. Cuando lo hice, sonó una respiración...
Tan sólo eso, una respiración complicada, difícil... Y supe que era su respiración... La reconocería en cualquier modalidad... La he sentido llena de placer, con tos, en medio de un parto... La he escuchado en tantas ocasiones, cerca de mí, a través de puertas, en interfonos, gritándome, diciéndome "te quiero"...
La reconocí, aunque jamás la había sentido así, a punto de apagarse...
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- ¿Has perdido todas las sonrisas? Tengo una en el puño...
Y me mostraba su puño cerrado.
- Si quieres te la regalo... Abro el puño y a coges al vuelo...
Y ella abría el puño y yo sonreía... Era automático...
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Madre tenía una escritura muy pequeña y con letras muy juntas. Ella decía que era para que no se perdieran, que cada letra se pudiera coger a otra y no tuvieran miedo...
Decía que las palabras valientes necesitan de letras sin miedo... Así era mi madre...
Siempre nos enseñó que las grandes cosas están hechas de las pequeñas... Si cuidas las pequeñas cosas, las convertirás en grandes... Si cuidas sólo las grandes, siempre serás pequeño...

viernes, 19 de abril de 2013

Mi niño no me come / Cárlos González

mi niño no me come: consejos para prevenir y resolver el problema-carlos gonzalez-9788484608868GONZALEZ, C. Mi niño no me come. [e-book] Barcelona: Temas de hoy, 2010

La madre se dispone a dar de comer a su hijo mientras lo distrae con un juguete.
Logra que se tome unas cucharadas, y, de pronto, el niño pone en marcha su plan estratégico contra el exceso de comida: cerrar la boca y girar la cabeza. Su preocupada madre insiste con la cuchara. El niño se retira entonces a la segunda trinchera: abre la boca y deja que le metan lo que sea, pero no se lo traga. Los líquidos y los purés gotean por
las comisuras de su boca... La inapetencia es un problema de equilibrio entre lo que un niño come y lo que su madre espera que coma. Huyendo de los tópicos, el pediatra Carlos González desdramatiza el problema y, proporcionándonos
claras pautas de conducta, tranquiliza a aquellas madres que sufren porque creen que su hijo no come correctamente.

Uno de los mayores mitos en torno a la nutrición es el de que "tienes que comer para hacerte grande". Es decir, mucha gente cree que el crecimiento es consecuencia de la alimentación. No es así.  Sólo en casos de auténtica desnutrición llega el crecimiento a verse afectado. Si compra usted una caniche, podrá mantenerlo por poco dinero, mientras que si compra un pastor alemán se arruinará comprando comida para perros. ¿Cree usted que si le diera mucha comida a su caniche, éste se convertiría en un pastor alemán?
En realidad, no crecemos porque hemos comido, sino que comemos porque estamos creciendo. El tamaño y la corpulencia de un pastor alemán y de un caniche están firmemente anclados en sus genes; cada animal se ve obligado a comer la cantidad de alimento necesaria para alcanzar su tamaño normal. Lo mismo ocurre con los seres humanos [...]
El niño de uno a seis años, que crece lentamente, come proporcionadamente menos que el de seis meses o el de doce años, que está en un periodo de rápido crecimiento. Por más comida que le dé, es imposible, absolutamente imposible, hacer que un niño de dos años crezca tan rápido como uno de seis menes o uno de quince años. 
[...]
La talla final que alcanza un individuo adulto depende básicamente de sus genes, y sólo un poco de su alimentación. 

martes, 9 de abril de 2013

Dormimos juntos? / Andrea Hoyos

HOYOS, A. Dormimos juntos. [e-book] Amazon, 2013

Andrea es escritora, aunque no vive de los libros. Quizá por eso sucumbe a la propuesta de Borja y se encierra para escribir con él un relato erótico que la haga millonaria y la libere. Pero el placer es gratis y la libertad es cara: a los dos les gusta el sexo y les da miedo el amor. ¿Llegarán a dormir juntos o harán sólo todo lo demás?

Más sincero que "Cincuenta sombras de Grey" (E.L. James), este relato erótico se adentra en la piel, en la vida y en el sexo por puro placer; sin cortapisas ni vergüenza. Realista y honesta, la autora juega con el lector y con la verdad. ¿Es autobiografía o es fantasía? Da igual: es literatura erótica de la buena, de la que se puede leer y disfrutar. Con una mano o con las dos.

Andrea se deja llevar y Borja participa con ella. ¿Quién controla a quién? El cuerpo, claro. Y el deseo. Os gustará.

Hace un par de años escribí una novela y me fue bien. Bastante bien. O sea, regular. No he ganado suficiente dinero para pagar la hipoteca, pero sí se me ha visto lo justo para despertar envidias en el curro.

jueves, 4 de abril de 2013

El club de los viernes / Kate Jacobs

JACOBS, K. El club de los viernes. [e-book]. Madrid: Maeva, 2008

Georgia Walker es ahora una mujer feliz. Pero las cosas no siempre han sido fáciles para ella. Doce años atrás, cuando estaba embarazada, su novio James la abandonó para irse a vivir a Francia. Pero ahora James ha regresado de Francia para conquistar de nuevo a Georgia y ejercer de padre de su hija ya adolescente...
Gracias a los consejos de una buena amiga, Georgia es dueña de una bonita tienda de lanas en Nueva York, donde da también clases de punto en su tienda y ha creado un curioso club.
En efecto, cada viernes, se reúne en el local de Georgia un variopinto grupo de mujeres que, a través de su pasión común por el punto, han desarrollado una fuerte amistad. La laboriosa actividad da pie a que cada mujer dé rienda suelta a sus anhelos, sus pasiones y sus angustias.

Georgia abría un poco la puerta, pues sabía muy bien lo que suponía hacer malabarismos para compaginar los hijos y el trabajo e intentar encajar además alguna actividad extra para sí misma: leer un libro, teñirse el pelo en la pileta del cuarto de baño, echarse una siesta...

***
- Creo que me he enamorado de mi familia.
Clarke se echó a reir y chocó su botella con la cerveza de James.
- Te felicito, viejo amigo..., hoy por fin te has convertido en un hombre.
***

- Te contaré un pequeño secreto, Cat. No todas adoramos nuestro trabajo todos los días. Dedicarte a algo que te apasiona no hace que el trabajo que conlleva sea más fácil.
- ¿Ah, no?
- No, sólo implica que es menos probable que lo dejes.